Esta historia comienza cuando un pequeño monstruo encuentra un bosque encantado en Austria, en la ciudad de Feldkirch, en el año 3119. El día que este pequeño monstruo encontró el bosque encantado hacía mucho calor, era de noche y era otoño. El nombre de este pequeño monstruo es Fathylupuz.
El bosque estaba muy silencioso y oscuro, lo único que se escuchaba era el llanto de Fathylupuz. Una especie parecida a una linda mariposa, pero que en realidad era un gran depredador, se acercó para preguntarle por qué estaba llorando. Él, desesperado y llorando, le dijo que estaba triste porque estaba solo y no conocía a nadie y tenía miedo. El nombre de esta mariposa depredadora era Marcpusus. Marcpusus le dijo que podían ser buenos amigos; Fathylupuz dejó de llorar y sonrió.
Pasaron los días y meses y Marcpusus y Fathylupuz eran como hermanos de lo amigos que se hicieron. Ellos siempre iban a la ciudad para cambiar de ambiente. Pero ese día fueron y un humano los vio y trató de tocarlos. Marcpusus casi lo muerde, pero Fathylupuz no se pudo defender. El hombre lo tocó y le dio una alergia, éste se fue corriendo rápidamente a un hospital para que lo atiendan. Fathylupuz se sintió muy mal. Marcpusus y Fathylupuz volvieron al bosque para que no los viera ningún humano.
Ya habían pasado 2 semanas de lo sucedido y todavía no habían vuelto a la ciudad porque Fathylupuz tenía miedo de enfermar a otra persona. Marcpusus le insistía para volver, le decía que no iba a enfermar a nadie, y de tanto insistirle lo convenció. Al día siguiente fueron a la ciudad y había carteles con su imagen pegadas en todos lados. Los carteles decían PRECAUCIÓN, BACTERIA DESCONOCIDA. Eran algo parecido a esto:
Fathylupuz se sintió muy mal al ver esto y se fue lo más rápido posible, pero de lo apurado que estaba se chocó con un humano. Éste lo agarró con un cápsula y lo llevó a un laboratorio para que los científicos lo investiguen y busquen la cura por si enferma a alguien o buscar algún químico para que desaparezca, pero Marcpusus no iba a permitir esto.
Comenzó a idear un plan para salvarlo de morir. Este plan debía desarrollarse en la noche para que ningún humano lo viera y para que no hubiera ningún científico en el laboratorio. Se transporto a todos los laboratorios para encontrar a Fathylupuz más rápido. Cuando se transportó al último laboratorio se encontró con Fathylupuz encerrado llorando porque tenía mucho miedo de morir. Estaba diciendo que se arrepentía de haber ido a la ciudad, cuando oyó unos golpes, miró hacia todos lados y cuando miró hacia atrás estaba Marcpusus tratando de empujar la caja de vidrio donde se encontraba Fathylupuz encerrado. Fathylupuz se puso muy contento de que su amigo lo haya ido a salvar, sintió que alguien lo quería.
Marcpusus y Fathylupuz empujaron la caja de vidrio en la que se encontraba encerrado Fathylupuz para romperla y salvarlo. Les tomo un buen rato pero al fin lograron tirarla y romperla. Cuando lo liberó se abrazaron fuerte y Marcpusus se disculpó por haberlo llevado a la ciudad ese día. Fathylupuz lo perdonó y ahora lo que faltaba era que salgan del laboratorio. Apurados agarraron el transportador que los llevó a todos los bosques y el último fue el de ellos.
